Viajar por el mundo: cómo planificar y con quién

Los amantes de los viajes pasamos los días pensando en nuestro destino postpandemia. Descubrí cuál de todos los modos de viajar puede ser para vos.

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Foto: Bigstock

Plantar un árbol, tener un hijo, escribir un libro y... ¿Viajar por el mundo? Sí, viajar, conocer, achicar el mundo a fuerza de oportunidades cada vez más accesibles en un mundo global donde nada queda lejos. Es una tendencia que llegó para quedarse: cada día son más las personas que sueñan con empaparse de culturas distintas, asomarse a otros costumbres y descubrir nuevos y asombrosos lugares.

Viajar por el mundo

Viajar no sólo significa tomarse un avión, subirse al auto y arribar a una nueva ciudad. El kilómetro cero es aquel momento en el que imaginamos una foto frente a la Torre Eiffel, en el que soñamos con pisar esa ciudad de grandes rascacielos y pantallas gigantes, cuando creemos sentir el aroma de cada frijol que conforma nuestra feijoada, fantaseamos con la ilusión de tener la buena fortuna y presenciar un espectáculo tan único como el de ver una aurora boreal.

Con todo eso soñamos estos días más que nunca y nos seguimos preparando.

En un universo cada vez más conectado, no parece imposible llegar a lugares recónditos del mundo. Viajar ya no es un lujo impensado para la gran mayoría, sino que se trata de un modo de vida.

Hoy contamos con gran cantidad de herramientas que nos permiten buscar muchísimas opciones de destinos, precios y hasta diversas formas de viajar

Tengas 20, 65 años o 100 años. Ya sea con amigos, una pareja, hijos, padres, desconocidos o solos. Por sólo unos días, de vacaciones por un mes, para encontrarse con uno mismo, ampliando nuestros estudios, buscando un nuevo trabajo, de luna de miel, planeando desconectarse de todo y todos, o sin ticket de vuelta buscando un cambio radical en tu vida.

viajar por el mundo

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¿Qué hacemos cuando todo es una pregunta pero sólo sabemos que viajar es la respuesta? Empezamos a soñar y a amasar el sueño. ¿Arrancamos?

¿Cómo viajo?

Por empezar tené en cuenta que las opciones para viajar y conocer el mundo son prácticamente infinitas, sólo debés pensar cuál es la que mejor se adapta a tu vida o a lo que estás buscando experimentar en este momento. El punto en común en todos los casos es el hecho de soñar con cada viaje, buscar distintos destinos y planificar cada pequeño rincón a conocer.

Viajes en familia

A la hora de planear nuestras vacaciones, muchas personas ven en los niños un impedimento para disfrutar, relajarse y divertirse todos juntos. Nada peor que ya estar estresado con el simple hecho de imaginarse a los más chicos corriendo y gritando entre la gente, o pensar en todo el esfuerzo y los kilos que implica armar el equipaje para que no falte nada importante. Hay que correrse de esa idea:

Actualmente, viajar cuando nuestros hijos son chicos, no solo es posible, también es un hermoso e imborrable recuerdo que quedará por siempre para todos los miembros de la familia

Lo ideal es poder combinar diversión con descanso y que, de este modo, toda la familia pueda disfrutar sin fin de una estadía de lujo.

viajar con chicos

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Para evitar situaciones agobiantes y momentos tediosos, hay cuestiones importantes a tener en cuenta a la hora de definir el destino de las próximas vacaciones.

Dónde viajar

En primer lugar, planificar con mucho tiempo de anticipación es fundamental para mantener la calma familiar. Asimismo, puede ser un buen momento para incluir a los más chicos, preguntarles qué les gustaría, y hasta saber su opinión sobre el tipo de destino a elegir.

Una vez que esto ocurre, se debe tener principal atención al medio de transporte que utilizaremos para movilizarnos hacia el destino, así como el que utilizaremos una vez que arribamos a tal lugar. De este modo será más simple planear las excursiones a las que nos interesaría concurrir, el tipo de equipaje que se usará e incluso qué llevar para entretenerlos durante todo el trayecto.

Además de preparar su comida, existen algunas opciones para agregar: pueden ser juguetes, cuentos, almohadones que puedan hacerlo sentir más cómodo y algún dispositivo que permita descargar y reproducir canciones infantiles.

vacaciones en familia

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¿Cuáles son los destinos preferidos por las familias? Es una pregunta muy difícil de contestar porque, en general, depende mucho de los intereses de cada uno y el ritmo que puedan llevar adelante en sus vacaciones. Más allá de esto, hay ciertos destinos que suelen ser elegidos por familias con chicos y, aseguran, volverían a hacerlo:

  • Argentina. existe una gran diversidad de destinos para todos los gustos, edades e intereses. Las sierras cordobesas pueden ser un plan mucho más tranquilo para las parejas con bebés, mientras que la playa divierte a los niños de unos años más avanzados. Para los amantes de la aventura, las caminatas y el aire libre, destinos como Mendoza o Bariloche pueden ser la opción perfecta.
  • New York. Muchos podemos verla como la ciudad del caos, pero también es una realidad que cuenta con gran cantidad de museos, parques, zoológicos y distintos lugares de interés para los más chicos de la familia.
  • Cancún. Más allá de las playas paradisíacas, la ciudad cuenta con una infraestructura pensada para la relajación y el disfrute de toda la familia. Con actividades pensadas específicamente para niños, parques acuáticos y la posibilidad de hacer snorkel, tanto padres como chicos podrán descansar lejos del estrés y el desorden.
  • Copenhague. La hermosa capital de Dinamarca puede ser realmente un destino inigualable para disfrutar en familia. Cuenta con grandes atracciones para que ninguno pueda aburrirse ni un sólo momento: desde las atracciones de los Jardines de Tivoli, hasta la diversión de Legoland, pasando por el barrio de Christiania.
cancun

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Viajar solo

Ya sea por miedo a lo que pueda suceder o inseguridades propias, muchísimas personas se privan de realizar viajes solos. Éste es un miedo que todos deberíamos dejar atrás. Ésto que pudo haber sonado a locura un tiempo atrás, es cada vez más elegido entre los jóvenes que, por diversos motivos, no encuentran algún compañero de aventuras. Lo que no sabían era que, la verdadera andanza estaba a punto de comenzar.

Rodrigo tiene 33 años y hace unos pocos meses se lanzó a un viaje solo por Italia cuando, apenas unos días antes de embarcar, su compañero se lesionó gravemente en un simple partido de fútbol con amigos.

“En el momento en que me enteré que iba a viajar solo me asuste un poco, más que nada porque uno siempre le tiene miedo a lo desconocido”

Pero él sabía perfectamente que tampoco podía perderse la oportunidad de experimentar algo nuevo y tan emocionante: sí o sí había que salir de la zona de confort.

Sol, que viajó a España teniendo once años menos que él, se sumergió de una manera más ligera: “Casi sin pensarlo puse una alarma de vuelos baratos y cuando encontré uno con destino a Madrid, lo saque”.

Para Cecilia, en cambio, el hecho de comenzar a viajar sola fue algo que se dio con más naturalidad ya que no lograba conectarse con otras amigas a la hora de organizar sus vacaciones. Fue de este modo que dijo basta de esperar, y tras una exhaustiva búsqueda viajó por su cuenta a Nueva York con sólo 26 años.

Todos coinciden en que al momento de arribar a destino tuvieron miedo y debieron pasar por un pequeño período de adaptación. “Cuando llegué fue medio raro porque estuve los tres primeros días sola en la habitación del hostel y me agarro un poco de miedo. Me preguntaba: ‘¿Tomaste una buena decisión?’ No estaba segura de que iba a conocer gente o no, pero después si fui charlando con los que estaban parando ahí”, declara Cecilia.

Más allá de esos primeros momentos de tensión, comentó que fue entre esas mismas paredes que conoció a un grupo de chicas con las que hoy en día se siguen viendo.

viajar solo

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“Haberlas conocido es lo más valioso del viaje. Creemos que fue algo del destino habernos conocido ya que todas habíamos viajado solas por su cuenta”.

Viajar nos abre la mente a nuevos paradigmas, pero animarse a hacerlo sin ningún acompañante suele enriquecernos aún mucho más

Mientras que Rodrigo insiste que la experiencia lo ayudó a salir de la comodidad en la que estaba, Cecilia sentenció: “Yo aprendí que podía organizarme sola y que viajar solo no tiene nada de malo. Hay que animarse”. Sol, la más joven a la hora de viajar sola explicó que vivir esto la hizo sentirse más tranquila con sus propias decisiones y la ayudó a relacionarse con gente que en otro momento no se hubiese relacionado.

La vuelta al mundo

Diario de viaje de los que se animan a más: ¿qué sucede cuando ya no nos imaginamos manteniendo una vida anclada en un mismo lugar? Cada vez es más común conocer gente que lleva una vida nómada con el fin de conocer cada ínfimo rincón del mundo, sumergirse en su cultura y ser uno más de ellos, sin dejar de mantener la esencia de su país natal ni por un segundo.

Juan Pablo tiene 27 años y está radicado en Barcelona hace tres, pero anteriormente pasó por Canberra, capital de Australia, para jugar a su deporte preferido durante un tiempo. “Decidí viajar por las ganas que tenía de jugar al rugby en otro lugar. Mi viejo tenía un amigo con el que habló y me consiguió un club para irme. La verdad no hubiese ido a Canberra sino”.

en que continente se encuentra australia
Canberra

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En ese primer viaje, que inició solo y al otro lado del mundo, tenía en su mente la idea de volver al año. Pero, a medida que el tiempo transcurría e iba conociendo nuevos amigos, lo que estaba casi establecido en su mente desde un comienzo, fue tomando otro color. Sin dudarlo explica: “No me costó mucho adaptarme. La verdad es que no me considero una persona con vergüenza o con problemas para comunicarse o hacer amigos fácilmente”.

Pasado el tiempo, finalmente regresó a Argentina. Pero, fue sólo por un corto tiempo hasta encontrar cuál sería su nueva residencia: Barcelona. La ciudad que lo abraza desde 2016 no sólo lo hace con muchísimos de otros extranjeros de todo el mundo, sino también con sus propios amigos de Olivos, de donde es oriundo. De esta forma, las costumbres se mantienen y disfrutan frecuentemente, más allá de aquellas nuevas que también van adoptando con el paso del tiempo.

Pero no hay que perder de vista que viajar es la prioridad número uno de todo aquel que esté subido a la movida. “Lo que más me gusta de estar acá es que tengo muy fácil acceso a viajar a otros países. Estando en Europa viajar no cuesta tanto como desde Argentina, y la vida acá también es mucho más fácil que en Argentina” dice Juan.

Asimismo, él mismo explica que su modo de viajar no va a cambiar con el tiempo, sino que elige una vida marcada por la espontaneidad a pesar de estar asentado actualmente:

“Me gusta sacar un pasaje y, sin planificar mucho, irme a recorrer y encontrarme con lo que me tenga que encontrar. Definitivamente no soy de las personas que planifican todo antes de un viaje”

Sin embargo, no todo es color de rosa para quienes deciden emigrar a otro país o vivir migrando constantemente. “Obviamente lo más difícil de estar en otro país es la falta de la familia, los amigos y las costumbres. Si bien uno las mantiene y aprende nuevas cosas, no es lo mismo estando en otro lado” explica Juan.

emigrar

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A pesar de los días malos o en los que más puede llegar a extrañar, cada día ve más lejana la idea de volver a radicarse en tu país natal: “En un principio estaba la idea de volver, pero eso va cambiando. Creo que en Argentina no podría tener la independencia que estoy teniendo fuera de ahí. Así que, por ahora, la idea es vivir donde yo pueda mantener esa independencia que logré”.

Definitivamente, vivir viajando hace que se genere una cadena sin fin de gente que comparte el mismo estilo de vida, haciéndose compañía y dándose aliento cuando uno más lo necesita. Si esta idea está rondando hace un tiempo en tu mente, no pierdas más tiempo y lanzate a vivirlo. ¡No hay nada que perder!

Trabajar por el mundo

A medida que vamos creciendo, las ganas de viajar y conocer el mundo son cada vez más fuertes. Pero también es verdad que, mientras estudiamos, es difícil poder ganar el dinero suficiente como para emprenderse en ese gasto. Para quienes buscan seguir con sus estudios universitarios o terciarios y tener una experiencia en el extranjero durante algunos meses mientras ganan dinero, animarse a un Work and Travel es la opción más atinada. Si bien es un plan de visado que se extiende a varios países, el más elegido por su diversidad de opciones es Estados Unidos: ciudades como Colorado, Hawaii, California, Nevada, entre otras.

Para esto es importante tener en cuenta que debe sacarse una visa especial, por lo cual es imprescindible contratar un servicio que ayude y oriente a hacerlo del modo más práctico posible.

trabajar viajando

Lucía viajó por primera vez a Vail a sus 21 años, cuando todavía estaba estudiando Arquitectura en la Universidad de Buenos Aires. Más allá de la posibilidad de poder viajar y ganar dinero, algo no tan fácil de lograr a esa edad, explica: “Lo que más me motivó a hacerlo fue la oportunidad de conocer personas de todo el mundo, aprender de otras culturas, tener nuevos amigos, disfrutar la vida desde otro lado. Además, el bonus track de la posibilidad de poder seguir recorriendo”.

El programa Work and Travel, así como su correspondiente visa, tiene una duración de apenas unos meses, los que coinciden a la perfección con las vacaciones de verano de las universidades argentinas. Si bien uno puede arreglar para tomarse unos pocos días durante la temporada para hacer pequeñas escapadas a pueblos o ciudades vecinas, y así ir aprovechando la estadía, es recién cuando caduca la visa que uno puede viajar por tiempos prolongados a otros destinos.

Enfrentarse a una nueva realidad, una cultura distinta y salir a ganar dinero por cuenta propia puede resultar un sube y baja de emociones: “había que bancársela bastante y siempre poner mucha actitud”. Pero a pesar de las adversidades que debió sortear, logró disfrutar mucho de la oportunidad y decidió repetirla nuevamente al año siguiente. Sin dudarlo manifiesta:

“Mi recomendación es que nadie se pierda de esta oportunidad”

Cuando ya no entendés el sentido a estar sentado tantas horas en una misma silla trabajando, las jornadas te parecen interminables y no pasa un día sin que se te venga a la mente la idea de si cambiar de empresa es la solución o hay algo más profundo, es momento de buscar un cambio real.

Muchos se dan cuenta de que el problema radica en su profesión y dan una vuelta de tuerca. Otros, en cambio, buscan experimentar más allá de los límites de su propia nación

La opción para quienes tengan unos años más y la libertad de irse por más tiempo es la de aplicar a otro tipo de visa que te permite permanecer un año en otro país trabajando de lo que estudias actualmente o de la carrera en la que ya te recibiste. Bajo el nombre de Work and Holiday, miles de jóvenes buscan vivir en carne propia lo que es ser parte de una cultura distinta. Las opciones son muchísimas, y cada destino cuenta con distintos requisitos de edad y exámenes de idiomas, entre otros.

La historia de Matías se parece a las de otros miles de argentinos que ponen pausa a su vida para salir a conocer otro mundo. Él es ingeniero en sistemas, y tras cuatro años trabajando en una empresa multinacional decidió dejar atrás su rutina y emprender un viaje con su novia al otro lado del mundo. “Vivir en el exterior era algo que tenía pendiente desde hace mucho tiempo, y encontré esta alternativa como una oportunidad para cumplir este anhelo.”

Sin pensarlo hizo todo el proceso de visado, pero lo más difícil fue tomar la decisión de finalmente abordar el sueño. Explica: “las ganas de vivir una experiencia diferente es lo que más cuenta, pero a la hora de tomar la decisión final tuvo mucha importancia el apoyo de mi pareja para emprender algo así.” Además, asegura que el pasaje lo compró cuando se dio cuenta de que lo peor iba a ser arrepentirse por no haber hecho algo que siempre quiso.

Ya instalado en Sydney, Matías combina sus días entre el surf y entrevistas laborales. Tiene un objetivo claro y es conseguir trabajo del área en que se especializó, aunque sabe que puede ser difícil. Pero lo más arduo es sobrellevar los momentos nostálgicos, donde uno se siente tan lejos de los afectos. “Lo más difícil por mucho es estar lejos de tus afectos, familia y amigos. Especialmente para mi que me encanta pasar los domingos comiendo asado en familia y sábados con amigos”.

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Lo interesante de realizar un viaje bajo la visa de Work and Holiday es que le permite a la persona trabajar de manera legal, así como entrar y salir del país durante un año a partir del momento en que pisa suelo por primera vez. Por lo tanto, es una buena opción para quienes quieran seguir viajando a pesar de estar instalados en un sólo país.

Lo más recomendable es recorrer ciudades cercanas a donde uno vive, y así aprovechar para realizar tramos no tan largos. Por ejemplo, si uno está instalado en Alemania, recorrer ciudades de Europa del Este es una gran opción ya que pueden conseguirse pasajes a precios muchísimo más bajos que si se viaja desde Argentina.

De ahora en más, las opciones que vas a encontrar para salir a conocer el mundo van a ser muchísimas. No pierdas más tiempo y… ¡a disfrutar!

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