James Bond tiene museo propio: una "guarida de villanos" en los Alpes suizos

Actualizado: 21 de abril de 2020

Los admiradores del agente secreto más famoso del cine, James Bond, ya pueden vivir una experiencia inmersiva en el 007 Elements, el primer museo dedicado al agente. Pero lo más impresionante es que se encuentra a 3.048 metros sobre el nivel del mar, sobre la montaña Gaislachkogel en Soelden, (Austria), una de las localizaciones utilizadas en la película Spectre.

El primer museo dedicado en exclusiva a James Bond se encuentra en lo alto de ese pico alpino y ha sido diseñado para parecer la guarida de un villano de la saga. Sin embargo, 007 no tiene aquí licencia para matar ni tampoco para ofender, ya que cualquier rastro de comentarios sexistas, racistas o inapropiadas ha sido eliminado de la muestra.

La llegada se realiza a través de una elegante y moderna telecabina con vistas espectaculares a las montañas nevadas, y el edificio de 1.300 metros cuadrados fue realizado únicamente con hormigón, acero y vidrio tan minimalista que se integra perfectamente con el entorno. Enterrado bajo el hielo, fue diseñado por el arquitecto Johann Obermoser que también diseñó el restaurante adyacente, Ice Q.

El centro, de 1.300 metros cuadrados, estilo minimalista y edificado con hormigón, vidrio y acero, está parcialmente excavado en la roca con el fin de integrarlo en el paisaje

El museo 007 Elements cuenta con nueve salas en las que se pueden observar varios objetos originales de las 24 películas de la saga, como el Jaguar C—X75 y la pistola de oro de Sean Connery.

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Sin embargo, el director creativo del museo, Neal Callow, ya ha advertido en The Times que quieren "mostrar el legado de los filmes desde un punto de vista moderno y políticamente correcto". Es decir, adiós al sexismo y al racismo de Bond, algo que, advierte The Guardian, es "como un museo de historia natural sin fósiles".

Qué se encontrarán los visitantes

En el vestíbulo un vídeo del director Sam Mendes recibe a los visitantes y en las salas se analizan y muestran gadgets, personajes y hasta las melodías que acompañan a 007. Pero nada de sus chicas. Y ahí es donde se ha borrado parte de las características del personaje. Según Callow, "los tiempos han cambiado, y además nuestro recorrido da un panorama general histórico, no entra en tanto detalle".

"Participarán en un viaje multisensorial, con paisajes sonoros emocionantes, una iluminación que acentuará el misterio y proyecciones visuales", describe Callow

"La estructura del relato que queremos contar, el ritmo de los espacios en el edificio y los movimientos entre la luz y la penumbra se han diseñado para crear una experiencia más cercana a una película que a un museo tradicional", agrega.

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Callow subraya que la intención es sumergir al visitante en el universo Bond de forma "elegante" y "divertida", y, al igual que el famoso agente al servicio de Su Majestad, el museo contará con los últimos adelantos tecnológicos.

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