Turismo Cultural: casas de famosos escritores para visitar en Argentina

Algunas de las casas de los más reconocidos artistas argentinos cuentan con visitas guiadas para que puedas conocer el lugar donde escribieron sus maravillosas obras.

Turismo Cultural

Jorge Luis Borges, Victoria Ocampo, Ezequiel Martínez Estrada y Ernesto Sábato, son algunos de los tantos escritores que marcaron un antes y un después en la literatura argentina. Hoy, a años de sus fallecimientos, sus hogares son abiertos al público para que puedas recorrer los pasillos y las habitaciones en las que se escribieron grandes obras literarias.

La casa Museo Ernesto Sábato en Santos Lugares

Santos Lugares es una localidad del Partido de 3 de Febrero en la Provincia de Buenos Aires, en la calle Severio Langeri 3135 de dicha ciudad, se encuentra la casa en la que vivió el autor de obras como El Túnel (1948) y Sobre Héroes y Tumbas (1961).

La Casa Museo se abrió al publico a mediados de 2014 y a lo largo de la visita, organizada por sus nietos, se puede recorrer el comedor, la biblioteca personal y el escritorio del artista, a su vez es posible caminar por el jardín que, según el mismo Ernesto Sábato, fue un lugar recurrente mientras escribía sus novelas.

Los recorridos se realizan los sábados de 13 a 17 y para consultar sobre disponibilidad y precios se puede acceder a este link, en el que los familiares cargan la información para todos aquellos que quieran visitar la propiedad.

La casa de Borges en Adrogué

La vivienda ubicada en Avenida Almirante Brown 301 en Adrogué partido de Almirante Brown, es la única casa en la que vivió Jorge Luis Borges que sigue intacta. El autor de reconocidas obras como El Aleph (1949) solía pasar todos los veranos de la década del 40 allí, es por eso que el patio se convirtió en un lugar importante para los amantes de la literatura argentina.

En el año 2011 la Municipalidad decidió expropiar la casa, para que no corra la misma suerte que los otros hogares de Borges, y la convirtió en una Casa Museo para que todos los fanáticos del gran escritor argentino puedan ir a recorrerla.

En la actualidad se pueden observar imágenes, se proyectan videos y se pueden observar escritos de Borges. Alguna vez él mismo aseguró: “en cualquier lugar del mundo que me encuentre, cuando siento el olor de los eucaliptos, estoy en Adrogué”.

La Residencia de Victoria Ocampo en Mar del Plata

El Centro Cultural Victoria Ocampo se alza en la calle General Matheu 1851 en Mar del Plata. Esta vivienda fue donada en vida por la escritora a la Unesco pero el Municipio de General Pueyrredón decidió comprarla en 1981 con el objetivo de convertirla en un centro cultural.

A lo largo de la visita se atraviesan las habitaciones, la biblioteca y la habitación de Victoria Ocampo. A su vez se pueden observar recortes de la revista Sur que fue fundada en 1931 por la artista.

La casa de Ezequiel Martínez Estrada en Bahía Blanca

El chalet ubicado en la Avenida Alem 908 en Bahía Blanca fue el lugar de residencia del artista hasta que falleció en el año 1964. Él y su esposa fueron los únicos residentes del mismo ya que la compraron cuando estaba recién construida y, una vez fallecidos, el Municipio la reconoció como Patrimonio Municipal.

A lo largo del recorrido se pueden visitar todos los espacios de la casa inclusive su biblioteca que fue reconocida por el Archivo General de la Nación. Dentro de la casa se respira una tranquilidad sorprendente y se oyen ruidos de pájaros que llaman la atención de todos los visitantes. Esto fue, según los organizadores del recorrido, fuentes de inspiración para el artista.

La casa de Ricardo Rojas

Convertida en museo en 1958 la Casa-Museo Ricardo Rojas está situada en Charcas 2837 (ciudad de Buenos Aires) y fue encargada por el escritor al arquitecto rosarino Angel Guido.

Allí vivió el ensayista y político desde 1929 hasta su fallecimiento en 1957 junto a su esposa Julieta Quinteros. La obra arquitectónica encarna el pensamiento americanista y nacional del intelectual expuesto en su su libro "Eurindia" (1924) y otros trabajos de quién fue también rector de la Universidad de Buenos Aires (1926-1930).

Su viuda donó todo su patrimonio al Estado, cumpliendo con el deseo de Rojas de convertir la casa en museo y biblioteca. En 1958 fue declarada Monumento Histórico Nacional.

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Con un estilo neocolonial resume en su arquitectura la fusión hispanoamericana con el barroco americano, que interpretó el ideario americanista e indigenista de Rojas. Un ejemplo de ello es la biblioteca incaica con revestimiento de piedra labrada, el friso que refiere a la puerta del sol de Tiwanaku y el monolito Ponce (Bolivia), así como las guardas de iconográficas prehispánicas.

La casa museo ofrece una biblioteca y hemeroteca que puede ser consultada, con más de 25 mil volúmenes, algunos autografiados y otros de ediciones importantes, con una selección de literatura argentina, hispanoamericana y española; así como un archivo documental cercano a 100 mil documentos con manuscritos originales.

El Museo Almafuerte y el Palacio López Merino en La Plata

En la ciudad de La Plata se destacan dos espacios culturales vinculados con escritores emblemáticos: uno es el Museo Almafuerte y el otro el Palacio López Merino, convertido en un Complejo Bibliotecario. Ambos dependen de la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de La Plata y conforman parte del patrimonio cultural de la capital bonaerense, ligado a la vida de los dos escritores.

El Museo Almafuerte, ubicado en calle 66 entre 5 y 6, funciona en la casona en la que el escritor pasó los últimos diez años de su vida y sintetiza la obra del autor de "A la libertad" y "Piú avanti".

Fue declarado como primer Monumento Histórico Nacional de la ciudad de La Plata en 1961 y Monumento Histórico de la Provincia y de la Nación. El Museo y su propuesta cultural son un homenaje al artista y promueven la consolidación como patrimonio público el lugar donde el poeta plasmó su acción literaria y humanística.

En el Museo se exhiben manuscritos, fotografías, dibujos, libros, periódicos, escritos sobre su obra, muebles y otros objetos que formaron parte de la vida del poeta. En el fondo de la propiedad todavía se puede ver el horno de barro donde cocinaba para niños y vecinos a quienes también les incorporaba los primeros pasos para aprender a leer y escribir.

En tanto, el Palacio bibliotecario Francisco López Merino que funciona en calle 49 y diagonal 74, fue inaugurado en 1911 y declarado patrimonio histórico de La Plata en 1985, ofrece tres bibliotecas: Biblioteca Central (universitaria), Biblioteca Almafuerte (juvenil) y la Biblioteca María Elena Altube (infantil).

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